Entrevistamos a la Comunidad Energética Local de Entrevías, un grupo vecinal que persigue tres objetivos: el medioambiental, producir y consumir energía renovable de cercanía; el social, robustecer las relaciones vecinales; y el económico, poder consumir a precio razonable una buena cantidad de la energía necesaria.
Instalación individual en Ruidera. Según la Comunidad Energética Local, el coste de instalaciones como esta se dispara a más del doble
1. ¿Cómo se llama
vuestra comunidad, cuándo la creasteis y con qué periodicidad os reunís?
¿Tenéis un lugar de reunión?
Comunidad Energética de Entrevías. Llevamos más de seis meses impulsando la
iniciativa desde un grupo motor, buscando vecinas o vecinos interesados, formándonos,
haciendo incidencia en el barrio, aterrizando ideas y dándole forma al
proyecto. Ya hemos conseguido conformar un grupo lo suficientemente grande,
tenemos los acuerdos de comunidad de propietarios y varios estudios técnicos
sobre la mesa. Ahora nos estamos reuniendo semanalmente para darle forma a toda
la parte de estructura del grupo: reglamento de régimen interno, constitución,
etc. y trabajando documentos compartidos vía telemática. El lugar de reunión es
variable pero contamos con los locales de las asociaciones vecinales de La Paz
y La Viña de Entrevías.
2. ¿Qué objetivos persigue?
Tiene tres objetivos la conformación de una CEL y la nuestra se ajusta a
los mismos con nuestro punto de vista personal:
-
Objetivo medioambiental, producir y consumir energía renovable de cercanía
y reducir emisiones de gases de efecto invernadero. Impulsar la imprescindible
transición energética.
-
Objetivo social: robustecer las relaciones vecinales, llevarlas más allá de
las puertas de nuestras vecinas más inmediatas, conformar comunidad y poder
escuchar las necesidades de todas las personas que quieran sumarse en el barrio
para amoldar un modelo que permita incluir el mayor número de situaciones
posibles.
-
Objetivo económico: con el actual precio de la electricidad poder consumir
a precio razonable una buena cantidad de la energía que necesitamos. En
cualquier caso reducir nuestras facturas eléctricas es importante pero el
objetivo no es puramente economicista. No queremos instalar muchas placas para producir
más y vender el excedente, sino reducir el máximo ese excedente. ¿Cómo?
Ajustando bien la instalación necesaria para reducir la inversión y poder incluir
al mayor número de hogares posibles que consuman una buen parte de energía de producción
propia.
3. Desde vuestra
experiencia, ¿compensa hoy por hoy la instalación de placas solares o
depende de las circunstancias?
Compensa siempre. Desde un punto de vista económico, los periodos de
amortización pueden ser más o menos largos. Con el actual precio de la electricidad
las amortizaciones de las instalaciones se han acortado y es posible que en 8
años de media se haya amortizado el coste de una instalación que funcionará al
menos durante 20 años. Si a esto le sumáramos las ayudas actuales, más a favor
aún. No se va a producir circunstancia alguna a futuro que ponga en cuestión
estas instalaciones.
Desde los puntos de vista medioambiental y social no hay cuestionamiento
alguno de los valores positivos que proporciona a la comunidad constituir una
CEL.
4. ¿Cuánto puede
costar la instalación por vecino? ¿Y por comunidad?
Si hablamos de instalaciones individuales el coste es superior, ya que un
único hogar deberá asumir la totalidad del coste de la instalación: placas,
inversor, cableado, etc. Por eso es muy interesante hacerlo colectivamente a través
de un autoconsumo compartido. En ese caso los costes disminuyen mucho porque
los elementos comunes se comparten, especialmente el coste del inversor que es el
elemento más costoso de la instalación. En nuestro caso hablamos de una
inversión de 1500-2000€ para que cada hogar tenga disponible una potencia instalada
de 1,5 kW, más que suficiente para los consumos de una vivienda media. En una
instalación individual este coste se dispara a más del doble. Además en
autoconsumos compartidos se pueden meter los consumos comunitarios, como si
fuese un hogar más del reparto, que en ese caso será asumido por la comunidad,
por lo que el coste individual es relativamente bajo.
5. Actualmente nos
encontramos con publicidad de instalaciones solares en todos los medios, ¿es
complicado elegir? ¿Qué factores tenemos que tener en cuenta como consumidores?
Hay una línea gubernamental que impulsa este tipo de instalaciones, y que
aporta una información técnica en la que apoyarse para impulsar este tipo de
proyectos. Teóricamente con esta información cualquier persona podría poner en
marcha este tipo de instalación de autoconsumo compartido, pero eso es muy complicado
por la dificultad del proceso.
Por ello han surgido entidades que dinamizan la instalación de
autoconsumos, bien individuales como compartidos llegando a acompañar en la
constitución de Comunidades Energéticas
Locales si asi se desea. Estas entidades, que en algunos casos también incluyen
la propia instalación en su servicio, aportan información, acompañan en los
pasos a seguir y facilitan todo el proceso, incluida la parte técnica. Se trata
de entidades independientes, no vinculadas a comercializadora alguna.
Por supuesto, la mayor publicidad a este respecto proviene de las
propias comercializadoras eléctricas, de
cualquier tipo y clase, que observan en nuestros tejados superficies muy
interesante para sus negocios. Ofrecen financiación de la instalación muy
ventajosa, eso sí, quien acepte esta financiación
se vinculará a la comercializadora durante muchos años. Estas empresas buscan
maximizar la instalación, con el mayor número de placas posible, nada de
amoldar el proyecto a las necesidades de los y las vecinas interesadas. El fin último
va más allá de abastecer a los y las vecinas, sino generar energía excedentaria
que venderán a altos precios pagando compensaciones muy bajas por ello.
Desde nuestro punto de vista este último modelo es puramente económico,
abandona cualquier fin social y casi medioambiental, y es un modelo del que
huimos al constituirnos como Comunidad Energética Local.
6. ¿Tenéis ya
dentro de vuestra comunidad ejemplos de instalaciones? En caso afirmativo,
¿cómo ha sido / está siendo la experiencia?
Conocemos algunas personas que se han instalado placas fotovoltaicas pero
en instalaciones individuales, que nada tiene que ver con los autoconsumos
compartidos de los que hablamos. El número de Comunidades Energéticas Locales
va en aumento pero aun es pequeño y no hay ningún ejemplo cercano ya en marcha del
que nutrirse. Esa es una dificultad del proceso pero a su vez el gran reto,
servir como ejemplo a mucha gente que está esperando que estos modelos se
generalicen.
7. Por último, ¿estáis en contacto con otras comunidades y organizaciones?
Estamos en contacto con algunas entidades de asesoramiento energético. En
el barrio tenemos a la Asociación Socaire ofreciendo talleres de asesoría
energética y trabajando con familias en situaciones de pobreza energética. Nos
conocemos, les hemos involucrado en este proceso y además uno de sus trabajadores
es un vecino del barrio que también se ha unido a la Comunidad Energética de
Entrevías. También hemos aprendido y nos hemos inspirado en las experiencias de
Ecooo, que impulsan la revolución solar como ellos mismos dicen. Y nos encanta
decir que nos hemos puesto en contacto con pequeñas empresas de instalación del
propio territorio que nos han ayudado a aterrizar el proyecto y cuantificarlo,
que es siempre la primera pregunta a responder ante quienes tienen dudas.
Buscamos con ello generar también trabajo en este campo en nuestro entorno, que
tan necesario es.
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